(...)
el sonido del agua
se ríe mientras cae
en espumosa cascada.
La lluvia que desciende
de tu Santa morada
cuando riega la tierra
se deshace en cristales.
Las aves de los cielos
con su vuelo elegante
diversos los colores,
delicado plumaje.
Su canto como notas
escritas en el aire
van dejando tu nombre
te van dando las gracias....
(...)
Dios eterno de poder,
tu gracia se manifiesta
en aquel que sabe ver.
María del Carmen García.